Vals triste

Sonaba el primer vals en el último bar.
Era el vals más triste jamás compuesto.
Bailé, mientras todos lo demás se marchaban.
Cuando el vals terminó tú viniste a rescatarme,
pero yo también me había marchado
con una bandada de cuervos.
Eran los cuervos más negros de todo el cielo.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s