Mientras las luces parpadean y mi recuerdo surca la distancia…
Mientras las horas pasan rápidas y los días lentos…
Mientras los pasos fríos resuenan en mis labios de silencio…
Queda la noche para esperar y el día para soñar.
Quedan tus ojos para alumbrar, los míos para observar. Tu risa para sentir.
Queda la lluvia, tras el cristal.
En un instante cabe una vida entera.
En un latido todos los besos.
En un recuerdo todos los años.
En una caja todos los sueños.